Según un estudio, los compradores sienten más confianza ante sus supermercados que ante los vendedores online
Una de las tendencias en los últimos tiempos, y una que puede tener además un impacto muy importante en el mercado y en el consumo, está siendo la transformación del consumo de alimentación en el nuevo campo de juego de la batalla del comercio electrónico.
Hasta ahora, los consumidores habían estado comprando cada vez más cosas en internet, pero, a pesar de ello, la alimentación y los productos de supermercado se estaban quedando un tanto fuera del listado de las compras online. El ecommerce no acababa de conquistar el mercado de la
alimentación.
Las cosas han cambiado ligeramente en los últimos años, haciendo que el mercado de los
supermercados se convirtiese en uno de los puntos calientes para el futuro del comercio
electrónico.
La entrada de grandes jugadores del ecommerce, como Amazon, en el mercado y el hecho de que los consumidores más jóvenes se sienten mucho más inclinados a comprar online de lo que lo estaban los grupos demográficos de más edad hizo que el e-supermercado empezase a tener una nueva vida. Incluso los jugadores clásicos del mercado de los supermercados han empezado a posicionarse en el terreno de la venta online.
Esto está teniendo un impacto en las reglas del juego y está modificando la situación para los jugadores de siempre. ¿Están los supermercados preparados para competir en la red? ¿O se van a convertir en el próximo terreno en crisis por el impacto de internet?
La cuestión es uno de los grandes temas de debate y uno de los que tendrá más ramificaciones en el futuro próximo, aunque quizás los supermercados de siempre pueden jugar con un arma secreta a su favor. Y es que, quizás sorprendentemente, en el mundo del consumo son quienes logran despertar mucha más confianza entre los consumidores.
Por qué nos fiamos más del supermercado
Eso es lo que acaba de demostrar un estudio de la australiana Monash University. En el espectro de las tiendas, los supermercados consiguen las mejores puntuaciones en confianza, superando incluso a la percepción general que se tiene de los gigantes del comercio electrónico que son pure players en la red.
“Sorprendentemente, a pesar del boom del ecommerce y de las compras online, los que menos confianza despiertan en el sector del retail fueron los vendedores solo online que puntuaban por debajo de sus equivalentes de retail”, explica uno de los responsables dle estudio. Compañías como Asos, por ejemplo, que solo venden en la red despiertan menos confianza que el súper de la esquina.
Esto es un problema para este tipo de compañías, ya que su principal activo a la hora de conectar con las audiencias es la confianza que despiertan en sus consumidores.
El dato es también una muestra del estado de las cosas y de la psicosis de los consumidores sobre su información personal. Porque, como recuerdan en las conclusiones, los compradores están cada vez más preocupados con lo que ocurre con sus datos y su información personal y eso los ha hecho más desconfiados en general con internet. En el caso de ciertos sectores de las ventas online, además, la desconfianza está ligeramente vinculada al tipo de productos. Es lo que ocurre con la ropa o el calzado.
La confianza es además importante, señalan en las conclusiones del estudio, porque se vincula a otro elemento más, el de la fidelidad. Los consumidores son más fieles y leales a aquellas tiendas en las que confían.